Por Arturo Salazar
“SALIMOS JUNTOS Y REGRESAMOS JUNTOS” Compañeros de ruta. Distrito Federal-Estado de México.
NOTA: Espero con este relato no llegar “al amarillismo” o la nota roja, algunas imágenes pueden ser algo fuertes, pero quiero hacer conciencia de la importancia de estar concentrados en el camino, así como de utilizar el equipo de seguridad.
Continuando con la “trilogía” de MotoRuteros defeños y mexiquenses en el camino, ahora decidimos visitar Mineral del Monte ubicado en el estado de Hidalgo. Poco a poco vamos encontrando vías para conocernos y compartir el gusto por las rodadas. La fecha de salida es el día 19 de Octubre. Poco a poco se van integrando compañeros que quieren compartir esta historia. Esperamos para ese fin de semana algo de lluvia y frio, así que nos preparamos con impermeables y todo lo necesario.
Inicia el día a las 5am, hace un poco de frío, pero siento mucho entusiasmo por salir a encontrar a los MotoRuteros y estar en carretera. Como va siendo costumbre, salgo del centro del DF, rumbo a Coyoacán para pasar por Marina. Son unos 30 minutos, los cuales los realizo con la obscuridad de la mañana.
Marina lista
Su servidor listo!
Son las 6:10 de la mañana y salimos rumbo al norte de la ciudad, sentimos las primeras gotas de lluvia del amanecer, además de un ligero frío en las piernas, en ese momento extrañé una calceta extra. Con puros semáforos en verde, llegamos al sitio de reunión en 40 minutos. Aun no llegan los carnales, pero sentimos a todos muy cerca.
El primero en llegar es Juan Carlos en su pulsar 135. Nos presentamos e inmediatamente compartimos experiencias. Muy poco después llega Jesús Valdés y su Suzuki GN. Casi al mismo tiempo vemos a Gustavo Barba en la Avenger 220 y Dano y Araceli en la Italika Vitalia 125.
Reunión de MotoRuteros
Ahora solo esperamos a Rafa y Dafne, que no tardan en llegar. Ya reunidos, salimos a las 7:25 rumbo a la caseta de “las pirámides” donde nos encontraremos con el profe Salvador y Enrique. De puntero va el buen Rafa y a mí me toca ir de barredora. Vamos a una velocidad promedio de 70 a 80 km/h. Siento mucho frio en mis pies, algo así como si tuviera mojadas mis calcetas. En 20 minutos llegamos a la caseta, ahí ya están el profe, Enrique y un amigo de ellos.
Nos reorganizamos para continuar el viaje, ahora va de puntero Jesús y Enrique de barredora. Pasamos la caseta pirámides-cd. Sahagún. Son algunos kilómetros de pura recta, al lado izquierdo se observan las pirámides del sol y la luna. Nuestro recorrido es muy tranquilo, son aproximadamente las 8:30 de la mañana, detenemos el camino en la gasolinera para pasar al sanitario.
Jesús al frente
Dano y Araceli
ACCIDENTE
A los pocos minutos nos dirigimos a la desviación de la carretera ciudad Sahagún-Pachuca, son las 9:20, llegamos a una curva muy pronunciada, entramos a ella y casi al salir me gana el peso y me acerco peligrosamente a la orilla que tiene mucha graba suelta, llega a mi mente un bloqueo mental, algo así como resignarme a caer, de repente las llantas patinan y vamos al suelo. Siento en mi mano izquierda la sacudida de la graba, también el peso de Marina sobre mí, Dano comienza a pitar para avisar a los punteros (ellos no escucharon). Mi primer pensamiento es para Marina, en ese momento es lo único que me preocupa, ella me dice que está bien. Los compañeros bajan de sus motos para ayudar de forma inmediata. Me ayudan a quitar el casco y los guantes, inmediatamente veo mi mano raspada y muy inflamada, no pensé que fuera algo serio, incluso pasó por mi mente el continuar nuestra ruta. Marina tiene algunos raspones, pero me dice que solo le duelen las rodillas.
Ahora a checar la GN y sus daños: direccional rota, palanca de velocidades doblada, retrovisor chueco. El tanque quedó intacto, al parecer mi mano salvó la moto jajaja.
La curva peligrosa (foto de Dano)
Manos por aquí y por allá, los hermanos y hermanas MotoRuteras nos ayudaban, unos arreglando la palanca de velocidades, los demás poniendo agua y lavando nuestras heridas. GRACIAS!
Quiero seguir con la ruta, subo a la moto e intento meter el embrague… es imposible! La realidad que no podré seguir en el camino. Les digo a los carnales que no puedo continuar, que voy a llamar al seguro para trasladar la moto, e ir a urgencias. Estamos aún metidos en la peligrosa curva, así que decidimos mover las motos y salir a un lugar menos peligroso. Ahí realizamos la llamada al seguro, y me dicen que llegan de 30 a 40 minutos. Estoy preocupado por los demás, les digo que sigan la ruta, que al fin de cuentas ya no tardan en llegar los del seguro. La gran respuesta fue: nos quedamos contigo!!! Salimos juntos y juntos regresamos. Ese gran gesto de amistad y compañerismo hizo que mi corazón reaccione con un latido de paz.
En 30 minutos llega el asegurador, checa lo acontecido y me dice que en esa curva son muy comunes los accidentes, que esa misma mañana acudió a auxiliar a unos motociclistas que también derraparon. Ellos están en peligro de muerte (aunque no los conozco, les envío bendiciones). En unos minutos más llega la grúa, la moto será trasladada al DF.
Jesús
Los carnales me dicen que se regresan con nosotros a casa, que otro día continuaremos nuestra ruta, pero, JUNTOS!!!
El plan es llevar la moto a casa, para después ir al hospital y checar nuestras heridas. Marina y yo vamos en la grúa, los carnales van siguiendo muy de cerca, pero en algún momento nos alejamos, ya que se hace presente la lluvia. Llegamos a casa en una hora aprox, el chofer baja la moto y la guardamos, él mismo nos lleva al hospital. Marina camina con dificultad… mi mano muy hinchada, parece un globo con agua a punto de reventar.
Primera revisión: presión bien… corazón bien…! Rayos X… La sospecha es confirmada: fractura en la mano. Una en el 3er metacarpiano y otra en el 2do. Marina algo similar, pero afortunadamente más leve, a pesar del dolor en sus rodillas, no tuvo mayor problema. El equipo de protección nos salvó de algo mayor.
Ya cada quién casa, informamos a los compañeros de ruta de los resultados, nos alegran sus mensajes de apoyo y fraternidad.
CONCLUSIONES
Utiliza equipo de protección.
No dudes demasiado en el camino.
Se buen compañero.
Confía en los demás MotoRuteros.
Infinitamente gracias Dano, Araceli, Jesús, Rafa, Dafne, Enrique, Salvador (y su amigo). Gustavo, Juan Carlos, por su fraternidad y compañerismo… gracias Marina por estar en las buenas y en las malas.
Gracias por la publicación hermano Zolin
CONTINUARA;
NOS VEMOS EN EL CAMINO