Después de tres salidas consecutivas a la tierra, volvimos al asfalto, a esa alfombra negra que nos guía al horizonte, con una buena compañía de mochila y mi Sra. que como el Fénix resurge con más fuerza.
Nuestro Destino es San Juan de los Lagos, en el vecino estado de Jalisco, un lugar que ya visitamos anteriormente pero rodando a bordo de la Suzu, esa vez fallaron varias cosas, la principal es que la cámara fallo y solo tengo un par de fotos de la ruta, así es que volvimos para documentarles un poco como es este Santuario, al que mi espíritu hereje también podría llamar el mercado de la FE.
Salimos tarde, la flojera me impedía salir a rodar y cuando lo logre ya pasaba de las 10 AM, tomamos camino hacia Lagos de Moreno, ruta que ya conozco bien y que tiene fama de ser una ruta peligrosa por los constantes choques de frente.
Apenas dejamos Leon y Luz me pide que le cambie el casco, ella traía el casco de cross y yo el nitro mica negra, no quería cambiárselo por que el nitro ya huele a oso después de mas de un año de acompañarme a diario ya aunque se lave tiene un olorcito medio raro, pero dado a que nomás no se acomodo con mi cascote azul cambiamos de caso.
Este casco de Cross es muy cómodo en ciudad pero en la carretera desespera un poquito, por el contrario el nitro es bastante cómodo en la carretera, tal vez muy ruidoso por las ventilas de aire pero cómodo, en ciudad si restringe un poco tu campo de visión, como cualquier integral, el único pero que le pongo es la mica negra, pero no he podido conseguir la transparente.
Dejamos atrás el monumento al Sr. de los caminos y tómanos el libramiento de Lagos de Moreno, mi paso es constante y la Sra. se comporta de maravilla el gasto en refacciones bien vale la pena, les comento que cambie mi llanta trasera, por fin jeje, ahora tengo la MT60 110 que es la original, ya no ruedo con una llantota de 120, a lo largo del viaje descubrí las ventajas y desventajas de esta llanta.
Tomamos la carretera que te lleva a Guadalajara, aquí ya son dos carriles por lado, vas cual si fuera autopista, hay un par de buenas pendientes y los trailers se vuelven lentos, mi Honda BROS saca todo el poder de su pequeño corazón de 150 CC para adelantarlos, aun así llevo un mejor ritmo que con la Suzu, digamos que los 25 CC ayudan bastante a llevar pasajero.
Nos topamos con una peregrinación de ciclistas, todos tienen su uniforme de ruta, en su espalda la leyenda TULTITLAN MEXICO nos habla de su origen, su destino esta a menos de 30 km y en su cara puedes ver la fatiga de vivir un par de días al máximo.
Me llama la atención como entre ellos se ayudan ya que la pendiente la afrontan abrazándose de otro compañero, no se si esta técnica les de mas fuerza o sea para ayudar al mas débil, lo que si se es que afrontan su ruta con compañerismo.
No se si sea la fe o el deseo de aventura, lo que los mueve a emprender estas odiseas, lo que si se es que se necesita condición, valor y unos muy buenos Huevos.
Al rebasar uso los faros auxiliares y si se da a notar mas la Sra. ya que puedo ver como les llamo la atención, no te presumo mis faritos, pues son humildes me gaste cosa de unos 150 pesos y mucho seso para poder instalarlos, si alguien quiere instalar algo similar en la honda BROS va a batallar un poquito, así es que pregunten y con gusto les responderé como me fue a mi con esta instalación, les hubiera hecho un documental pero cuando estoy trabajando en mis inventos necesito concentrarme en ello y no se me da el andar tomando fotos.
Después de saludar a algunos ciclistas y tomarles algunas fotos, llegamos a San Juan de los Lagos donde un error mío causo que tomara un libramiento que te ahorra poco tiempo y te cuesta 20 pesos, dude un momento en pasarme la caseta pero terminamos pagando la cuota.
Me guíe por instinto al centro, donde buscaríamos que comer.
Me perdí, de repente no supe para donde seguir, mi confusión fue notada por un guía turístico que acababa de abordar una camioneta delante de nosotros, me dice; hey MEN¡ (no se por que todos los guías son cholos) sígueme te consigo estacionamiento. Pues vámonos, aquí ni loco dejo mi Sra. abandonada por horas teniendo placas de otro estado.
Después de un par de cuadras llegamos al centro, gente y comercios a más no poder, nuestro cholo-guía nos llevo a un estacionamiento donde por 30 pesos podíamos dejar la moto todo el día, guardamos lo que pudimos en el top-case y lo que no cupo a la mochila, ni modo a cargar con los cascos.
Hace unos párrafos llame a este lugar mercado de fe, se que la fe de las personas no se compra, pero la cantidad de negocios y vendedores ambulantes es simplemente increíble, en mi vida solo un par de veces he visitado la villa en el DF y si bien en ese lugar también hay mucho comercio y gente aquí por ser un lugar mas chico la sensación de estar apachurrado aumenta.
Llévelo llévelo baratito, el rosario hecho de rosas, el milagrito, el escapulario, la medallita de la virgen de San Juan, el Cristito mire que bonito es hecho a mano no es chino, es del que hacen artesanos mexicanos. Whoww por momentos es desesperante tener que estar diciéndole a todo el mundo que no te interesa lo que ofrecen, como pudimos llegamos a la Catedral Basílica donde la cantidad de gente que lucha por entrar es increíble, vez escenas que te hacen sentir extrañas sensaciones, gente que llora, gente que se derrumba, gente que encuentra paz en este lugar.
Mi jefe en paz descanse, era fiel creyente el llego a recorrer la ruta a pie desde Leon a San Juan de los Lagos, en las peregrinaciones de Enero, en una recorrido que implica caminar unas 20 a 24 horas sin parar para recorrer los poco mas de 90 kilómetros que nos separan de San Juan, el mencionaba la alegría y el sentimiento que te da llegar a la basílica, el decía que bien vale la pena hacerlo, creo que ese sentimiento es similar al que sientes cuando llegas a tu destino después de tanto rodar y te das cuenta que todo el cansancio valió la pena por el simple hecho de que ahora lo has vivido y es mejor a lo que imaginabas.
Estábamos por entrar a visitar, cuando en la fuente de la plaza, comenzó el show de luz y sonido, por ser de día las luces no sirven de nada, pero las aguas de la fuente saltan al ritmo del guapango de Moncayo, lo cual nos hace sentirnos mas Mexicanos que los Nopales y nos deja ver un poco del orgullo de Jalisco.
Ya teníamos hambre así es que tomamos camino hacia el mercado, mucha gente se te acerca ofreciéndote llevarte a su fonda, la verdad la comida aquí es cara, creo que la gente abusa un poco y me recuerda lo que mucha gente dice; “en ese pueblo si no es por su virgen se mueren de hambre” la mayoría de fondas ofrecen comida corrida a un precio elevado de unos 70 a 80 pesos el platillo, recordando las tortas de carnitas que compartí con Edgar la vez pasada decidimos repetir.
25 pesos la torta, que llevados, pido una para mi y otra para Luz, veo que me las sirven dobles ósea dos bolillos, le digo a la señora me vio cara de hambre, o que show, me responde; así las sirvo yo, ahh tonces es una de 25 pesos, No joven es doble……
Ahh que la chingada pues yo solo pedí una, aunque ya sabia que iba a pedir la segunda, ya no la arme mas de jamón, pero vamos esto les habla del servicio y lo ventajosos que son en estos lugares, por otro lado volvimos a saborear una coca cola desechable en un envase de vidrio.
Tomamos camino hacia el mercado de dulces típicos, ya saben para probar el postre de a gratis y de pasada llevarnos algo mas para los amigos y familiares, El colorido es increíble y pese a la gran cantidad de gente en todos los locales te ofrecen muestras de cajeta.
Aquí encuentras cajeta quemada, de nuez y envinada, alfajor, cocada, biznaga, jamoncillos, tamarindos, quebraduelas, amarantos y borrachitos sabor champaña de la francesa ehh no de la china.
Con 200 pesos me traje medio kilo de alfajor, biznaga, cocada, un rollo de guayaba, jamoncillo y tamarindos, je je je casi sales diabético de este lugar.
Regresamos a la catedral donde ahora si pudimos entrar por uno de los cruceros, me tome un momento para contemplar la arquitectura de este lugar pero viendo que seria imposible llegar al altar decidimos retirarnos, en el atrio se encuentra una imagen del PAPA Mexicano, don Juan Pablo segundo, la cual es muy solicitada para las fotos, hay una enorme fila donde después de 30 segundos te das cuenta que hay que aplicar lo gandaya para lograr tomarte la foto el sonido de tambores y machetes llama la atención de la gente, son danzantes otro espectáculo mas, pero este no lo perderíamos.
Tanta gente y comercio me enfado por fin, si bien San Juan es pintoresco, lleno de tradiciones, buena arquitectura y folclore mexicano, no es digno de dedicarle más que un par de horas ya pasaba de la una y decidimos regresar a casa.
En el regreso a nuestro hogar, emprendimos la primera exploración Motorutera a la mesa redonda, que es como la conocen en Jalisco, Luz les platicara un poquito mas de esto, yo por mi parte me reservo los detalles hasta que dedique una rodada en exclusiva a este lugar.
Por otro lado nuestra Llanta se comporto de maravilla, al menos yo prefiero el rodado original, tanto en tierra como en pavimento la moto se siente mas ágil, la única ventaja que veía en una llanta mas grande es el frenado, que mejora un poquito mas, en cambio pierdes un poco de aceleración y maniobrabilidad, yo en lo personal me quedo con el rodado original.
EL RELATO DE LUZ
En mi opinión este no es el viaje mas largo que he hecho como mochila de motoso, pero fue una experiencia inolvidable, no estábamos tan lejos de casa, si lo vemos aun en mapa no era muy lejos mas sin embargo de ida llevas muchas ansias por ver el santuario de Fe, tampoco era mi primera vez en viajar a San Juan de los Lagos pero esta visita me emociono desde el momento en que la propuso, no solo por la emoción que se siente ver tanta gente con una misma Fe, sino también por los dulces jeje.
Bueno dicho sea de paso por motoso. De ida fue un poco largo el viaje y algo incomodo por la cambiada de cascos, no suelo ser tan remilgosa pero la verdad el casco azul me estorbo esta vez, nuestro camino es placentero por los paisajes que nos ofrece a lo largo y a lo ancho, en la carretera nos encontramos con unos ciclistas que la verdad mis respetos por que son personas que no van nada cómodos, tan siquiera uno prende el motorcito y listo, pero ellos se lo avientan a todo pulmón, en fin llegamos y es cuando doy gracias de traer moto, por que de cierta forma caben en cualquier lugar, encontramos un estacionamiento bajamos de la moto y nos dispusimos a buscar la entrada mayor del templo.
Llegamos al templo, estaba a reventar, eso no es raro en cualquier domingo del año, como vimos que no cabía ni un alfiler, nos fuimos a buscar de almorzar por que la verdad no habíamos comido nada y parecíamos niños dios….. di ospicio jeje. Cuando al fin llegamos a un puesto y se nos hizo bueno el manjar, pues solo se nos antojo una torta, pero que creen? La señora que nos atendió en seguida nos vio la cara de turistas, por que en ves de servirnos una torta nos la sirvió dobles. Motoso llego a su meta pero yo la verdad no pude, por que estaban a reventar pero en fin, nos dispusimos a buscar la calle de la alegría o sea la de los dulces, que en lo personal me encantan.
Llegamos a un puesto que se llama “las socias” la verdad nos atendieron muy bien, pero eso si esta mas que comprobado, ahí con 200 pesos la haces para traerte municiones de dulces como para un mes, bueno regresamos al templo para ver si podíamos llegar a la meta de visitar el altar, pero no se pudo, así que lo vimos de lejitos, me basto con eso para pedirle: por favor virgencita que este niño no me vaya a tirar en la carretera!!
Cuando regresamos por la moto ahí estaba intacta pero algo que comprobé de mi piloto estrella es que se desorienta, en un mundo de gente bueno en fin, saliendo de San Juan llegamos a comprar algo para hidratarnos pero a motoso se le vino una idea que de principio se me hizo un tanto descabellada preguntar si había cervezas ¡¡DUFF!! Aunque ya no se si sea verdad por que lo dice tan convencido hasta al momento de mi relato.
Cuando llegamos a otra gasolinera en carretera me dijo muy convencido: tengo que llegar a ese cerro en una hora, yo por mi parte llegue a pensar que me estaba cotorreando, yo me dije na no creo que lo logremos, pero al llegar a Lagos de Moreno y desviarse por una ruta que yo no conocía fue cuando empecé a creer que si se atrevía a hacer esa locura (estoy hablando del cerro de la mesa muy conocido por estos rumbos del bajío), le preguntamos a un señor que encontramos en nuestro camino que si faltaba mucho para llegar y nos dio datos precisos hasta nos contó las vueltas ,llegamos a un pequeño pueblo que se llama La Trinidad, ahí volvimos a preguntar por que la ruta tenia dos caminos por donde recorrer pero queríamos saber el menos doloroso.
Cuando al fin llegamos a un puente que cruzaba por debajo de la carretera empezó mas la confusión, llegamos a otro pequeño pueblo ese si no recuerdo como se llama, pero la verdad yo me empecé a desesperar con la madre naturaleza, hacia mucho calor mis piernas ya no aguantaban mas estar en una sola posición, hasta que al fin dimos con el pasaje secreto y para colmo parecía un pueblo fantasma, no había gente en la calle solo se asomaban vacas y borregos, bueno al fin llegamos a las faldas del cerro me baje de la moto ya no podía mas asi que trate de caminar cerro arriba.
Llegue hasta donde pude por que la verdad ya había dejado medio pulmón detrás de mi y le dije a motoso que el fuera a explorar, en medio de lo que parecía ser un suicidio o sea subir ese cerro nos encontramos con don Tarcisio, un señor muy amable que me ofreció sentarme en una silla hasta que regresaran por mi, en el lapso de una media hora oí a lo lejos a la Sra. Que venia con todo el peso de las chamarras los cascos y mi piloto estrella sin poder frenar en la bajada, tanto que venían un grupo de monjas cerro arriba y se vio como en las mejores películas de la india María, lastima que para entonces ya se había descargado la cámara.
Bueno después de esa odisea nos quedamos un rato mas platicando con don Tarcisio. Cuando vimos que ya no nos quedaba mucho tiempo para el regreso dimos marcha a nuestro camino de regreso, al menos a mi ya no se me hizo tan largo como de ida, cuando vi la primer colonia de la entrada a Leon me alegre y supe que ya estaba en mi territorio nuevamente. Este relato me pareció agradable para contarlo espero les agrade a ustedes y me desvirtúen sanamente jeje. Saludos desde Leon a todos nuestros amigos de Moto Ruta ¡¡¡Nos vemos en el camino!!!
MOTORUTAMEXICO MOTOCICLISMO INDEPENDIENTE