Kilómetros y Kilómetros más, recta interminable, secuencia de lineas hipnotizantes en el camino, el cansancio aqueja, y la mente se esfuerza por mantenerse enfocada, la realidad es sencilla, me está dando sueño, y estoy a nada de quedarme dormido…
Segunda Parte del relato: AQUÍ
Tercera Parte del relato: AQUÍ
¿Como escribir algo que en un momento parecía lejano?, algo que me sonaba a un pequeño sueño inalcanzable en su momento, ¿como escribir de eso que viviste tantas veces a través de tu computadora?, viendo el Google Maps, estudiando la carretera, viendo tiempos, leyendo relatos, para que al final del día, apagara la PC y dijera, pronto… sin una fecha exacta.
La única manera posible de escribir eso, es como Rodar a Durango, simplemente ponerse a hacerlo, asi que espero me acompañen en estas lineas.
La leyenda:
En el principio de los tiempos, el mundo estaba cubierto por una terrible oscuridad, el agua de los mares lo cubría todo, no había ningún tipo de vida y el mal dominaba la tierra. Entonces Dios decidió limpiar la tierra para poner allí al hombre, a los animales y a las plantas. Pero el diablo se resistió a desalojar, por lo que durante 52 años el Diablo y el Arcángel San Miguel lucharon por la posesión de la tierra, los espadazos se escuchaban por toda la Sierra, Finalmente, el arcángel San Miguel clavó su espada en el corazón del Diablo, que herido mortalmente clavó su cabeza en el barro y dejó la espalda al descubierto para convertirse en piedra con el paso de los siglos.
La realidad:
Existen algunas versiones sobre el nombre tan particular que recibió esta zona. Una de ellas dice que las impresionantes barrancas que se despliegan a ambos lados del camino hacen ver al diablo. Otra afirma que el nombre le viene de lo peligroso de tantas quebradas que hay entre las conformaciones montañosas de la Sierra. Una más afirma que se debe a lo fuerte que sopla el viento y el ruido que provoca al filtrarse un sin número de corrientes de aire.
Lo que yo dije:
La carretera tan misteriosa y dueña de tantas leyendas y “disiones”, actualmente esta decayendo al construirse la nueva carretera, muy recta y llena de hermosos puentes que cruzan ríos y barrancas; y con profundos y bien construidos túneles de concreto que traspasan los cerros como si fueran intestinos, la antigua y legendaria carretera Nº 40 que pasa por el Espinazo del Diablo, con sus abismos a ambos lados y coronada por altísimas y espectaculares rocas, ha quedado convertida en una bonita carretera, casi sin tránsito, que curva tras curva pasa por las zonas arboladas y vistas espectaculares de las montañas de la Sierra Madre.
El Ahora:
Hace un par de años, supe de la existencia de dicha carretera, por un relato de un otrora colaborador de Motoruta (Augusto) (Click en los enlaces para saber de qué hablo). Me di a la tarea de investigar más y oh sorpresa, había varios relatos de Motoruteros que anteriormente la habían visitado, y no solo eso, sino varias veces, hablaban de “Rodar mas alla de los sueños” de cómo se “Sacudian 124cc” al ritmo de la carretera, de los “Prestigiosos vuelos en Carretera“, y todo lo que esto incluía, me parecía lejano y ajeno, como cuando leemos un libro de geografía, no obstante, mi entusiasmo no hizo otra cosa más que crecer, ya sea por una u otra cosa, la realidad es que no podía dejar todo y salir a rodar el espinazo. Paso el tiempo y pasaron rodadas a otros destinos pero seguía pendiente esa carretera.
Finalmente a mediados de año, se comenzó a organizar la Segunda Reunión del Sitio de Motoruta México. Yo con una moto recién adquirida estaba dispuesto a ir a donde fuera, para mi complacencia, entre los destinos se eligió Durango, si, esa tierra donde inicia la carretera 40, la que pasa por el Espinazo del Diablo, inmediatamente mi cabeza maquilo, e hizo cálculos, hay tiempo, pensé. Meses fueron y la fecha se acercaba, yo entre que veía y no clara mi asistencia, debido a proyectos y fechas personales. Finalmente, ya cerca las fechas de dicha reunión, hago presupuestos y no cuadran, las fechas puestas por los organizadores (Hola Almighty y Zolin) tampoco me cuadran, eso me desanimo bastante, asi que continué resignado los días que quedaban a no asistir .
Hasta que un mensaje de mi amigazazaso (no es sarcasmo xD) Almighty amablemente me ofrece “subsidiar” parte de mi viaje, su deseo es que los pueda acompañar, gracias amigo por todo, lo comento con mi novia porque todavía me encontraba indeciso y ella me dice, hazlo, por algo se dieron las cosas asi, nuevamente como alguna ocasión comente en otro relato (Rumbo a la Sierra Gorda de Querétaro), dios nos la guarde mucho tiempo asi (xD). Con este incentivo, rehago cálculos, y forzando un poco las fechas, ahora si todo me comienza a cuadrar. Saldría un día después de que varios compañeros salgan, ellos salen sábado, yo saldría domingo, una ruta inicial de aproximadamente 950 km. posteriormente unas variantes a la ruta que los demás llevan y todo listo, planes restaurados.
El máximo kilometraje que he hecho en un día hasta ese momento eran 768 km en un día, con descanso de varias horas en una moto con 23.5 Hp de potencia (Pulsar AS200 en una “ida y vuelta a Acapulco“), ahora la situación es diferente, solo tengo a mi disposición 15 Hp en una moto 155cc, eso implica, más tiempo, pero nada que no estuviera dispuesto a aceptar.
Los preparativos los inicie con una semana de anticipación, desde preparativos a la moto como el servicio, completar mi kit de herramientas y consumibles etc., inclusive tuve que hacer las maletas desde 4 días antes, va a ser un fin de semana bastante ocupado y yo tendré que llegar de todos los menesteres del viernes-sábado a dormir y salir a las 5 a.m. del domingo para llegar sin problemas a Durango, o eso pensaba yo.
Esos pocos días transcurrieron más rápido de lo que pensé, y con las despedidas necesarias de mi novia “N” y mi familia desde la víspera nocturna, me voy a acostar el domingo a la 1:00 a.m. tardando en conciliar el sueño como en mis primeras rodadas, vuelvo a sentir ese calambre en el estómago, sé que se trata del ansia, la anticipación, el nerviosismo apretando fuerte. Paso unas horas intranquilas de sueño y el despertador suena, 4:30 a.m. Es hora.
Lentamente me levanto todavía deseando dormir más, y es que debo decirlo los últimos días fueron muy cansados y mi cuerpo me pide descanso, otra parte de mi mente me dice, “no hay descanso que hoy Durango nos espera”, esto me da bríos, y empiezo a prepararme para el viaje que estoy a punto de afrontar, un desayuno bastante frugal, todavía no hay ruido en la calle, y en mi casa todos estan dormidos, el silencio domina todo, solo es interrumpido por el botón de encendido de mi motocicleta; bruuuum!! arranca con ganas la Suzuki Gixxer que me ha acompañado a lo largo de estos meses, pienso para mí, tal vez sea el último viaje largo que haga con ella, vamos a exprimirla. Sencillos preparativos para salir ya que había dejado todo listo y aun asi voy saliendo de mi casa a las 5:55 a.m.
Bueno, no muy puntual, pero iniciamos bien. Normalmente trato de salir lo más rápido posible de la ciudad, acelerando para dejar atrás la CDMX, pero esta vez lo hago con calma, no llevo una prisa que me coma, sé que el viaje que me espera hoy será extenuante, así que desde el inicio procuro mesura. Aun así, no tengo obstáculo alguno, la ciudad esta desierta, y llego sin problema a la caseta de Tepotzotlan, este camino ya me lo se casi de memoria, la carretera 57D me recibe de manera gélida, el frio pega, pero voy preparado para ello, por lo que no tengo problema, sé que en un par de horas más voy a tener el sol azotando mi espalda y tendré que quitarme algunas capas de ropa.
Paso a toda velocidad de 155cc por Tepeji del Río, Encinillas, Polotitlan, y hago la primera escala en la gasolinera antes de la caseta de Palmillas, la naturaleza llama. Al salir, un caballero estaba admirando la moto, y comienza una platica, preguntas que muchas veces nos hacen, ¿a donde va? seguido por un ¿y si llega?, ¿cuanta velocidad alcanza la moto?, acortado en un “¿y cuanto levanta?”, y demás variedades. Nos despedimos y continuo mi camino.
Tomo el desvió antes de entrar a Querétaro hacia San Luis Potosí, y todo ocurre sin novedad, y es que esa carretera de verdad que es recta, aun asi, voy entretenido viendo paisajes nuevos y conociendo una carretera por la que no había pasado.
Son las 9:30 y veo que faltan menos de 200 km para San Luis, siento que llevo un tiempo excelente, no me confió y continuo avanzando kilómetros en las rectas autopistas. Es por los letreros, que me entero, acabo de entrar a Guanajuato, he estado en varios de esos lugares que me indican los señalamientos, y no puedo evitar tener en mi mente al estimado Jose Alfredo con sus “Caminos de Guanajuato“, pasando voy por el estado donde la vida no vale nada (pienso para mí, si vale y mucho, hay muchos esperándome), feliz de la vida, y comienzo a notar un cambio de tonalidades en la tierra, repentinamente los parajes me dan la impresión que se vuelven de un color sepia rojizo, y la tonalidad de los rayos de Sol se torna más cálida.
Es solo un pequeño tramo lo que recorro de Guanajuato, que se va como en un parpadeo, y entro al Estado de San Luis Potosí, ya con el sol casi en el cenit, el calor empieza a calar. En cuanto veo el señalamiento de San Luis, me detengo a quitar la primera capa de ropa, y tomar unas fotos, informar a todos los pertinentes en donde estoy y continuo.
Son las 11 a.m. y estoy entrando a San Luis, sigo llevando un buen tiempo, ya casi llego a la mitad de mi jornada. Los colores de San Luis Potosí me tienen anonadado, es solo un esbozo del Altiplano Potosino, y debo decir que me deja una sensación muy agradable, ver como el semi desierto continua a lo lejos, los colores tan vivos de la tierra, de las rocas, ver como se llena el paisaje de colores rojizos, marrones tan vividos contrastan con un azul profundo que tiene el cielo, sentir el aire tibio dentro del casco de la moto es algo que definitivamente me invita a regresar exclusivamente a tierras potosinas para recorrer y perderme en ellas. No lo se, tal vez este 2017 sea un destino, veremos… veremos…
El ritmo que llevo en la moto me parece bastante bueno, no baja de 100 km/h y no sube a más de 115, pienso que llevo mejor paso que con la FZ esos 2 hp y 3 de Nm que esta Gixxer tiene con respecto a la Yamaha si hacen una diferencia a la larga. Siento la necesidad de hidratarme así como también la moto necesita combustible, viene un poco gastalona por llevarla a casi tope de R.P.M., asi que decido tomar un pequeño descanso de unos minutos en la primer gasolinera que vea.
- Colores Potosinos
- Fauna de las gasolineras potosinas xD
Nuevamente me reporto con todos y hablo por teléfono con N y mis padres, oh casualidad, ellos acababan de pasar no hace mucho por donde yo voy recorriendo, ellos están en un viaje a tierras Zacatecanas, y me advierten que de San Luis a Zacatecas, todavía es un buen tramo, yo naturalmente dije, “si que tanto puede ser… ”
Ups!, esta pequeña parada me costó más tiempo del que pensaba, es hora de darle de nuevo al camino con ganas.
Comienzo con bríos renovados a consumir kilómetros, el día esta espectacular, el calor se siente, pero el aire de la moto me refresca, el día presenta esporádicas nubes que no alcanzan a cubrir el sol, para mi este día es perfecto. Salgo al libramiento de San Luis que va rumbo a Matehuala para evitar entrar a la ciudad, se que es un lugar muy bello, pero sera para otra ocasión. Los paisajes me tienen impresionado, siempre he sido un gustoso de la carretera desértica, y esta carretera tiene mucha tela de donde cortar para un ojo como el mio, tanto así que no puedo evitar detenerme a tomar fotos, sé que me consumirá tiempo, y llegare más tarde a Durango, pero lo vale… Durango todavía en esta etapa del viaje se ve muy lejos, ya recorrí aproximadamente 460 km. 100 km más de lo que había recorrido de un solo tiro, y aun asi, sabía que no estaba ni cerca de mi destino.
- Carretera San Luis Potosí – Zacatecas
- Estos caminos que andamos
- Vamos a la mitad
- Hola de nuevo
Retomo la figura en la moto y nuevamente avanzamos, Kilómetros más adelante, veo un señalamiento que me causa un algo especial, “Bienvenidos a Zacatecas”. He llegado a la tierra que vio nacer a mi padre, Zacatecas, aquí es donde un fenómeno extraño ocurre, no sé si solo sea a mí, pero llegar a los dos estados de donde son originarios mis padres (Zacatecas y Michoacán) es como si sintiera un llamado interno, y tal vez sea cierto, la tierra llama, aun no sean mis orígenes como tal, parte de mis raíces están en aquellos estados.
Me detengo a tomar foto nuevamente, voy ligeramente atrasado en mis tiempos, son pasadas las 2 p.m. hago cálculos rápidos y no me preocupo mucho. Estaba subestimando el tamaño de Zacatecas definitivamente.
- El estado de mi padre
- De aquí soy también
- Gixxer al color del cielo que vamos dejando atrás
- Esos Cerros pelones que se ven en el horizonte
Me subo de nuevo a la Gixxer, y reinicio el camino, al poco rato algo empieza a preocuparme, no he visto Gasolineras, y la última vez que cargue fue entrando al estado de San Luis, la moto ya viene resintiendo el paso, y la gasolina en el tanque baja considerablemente. Es hora de preocuparse por encontrar gas.
Pocos letreros o indicaciones veo en este estado, a los lejos veo un señalamiento, Gasolinera 10k, perfecto! pienso, efectivamente veo el letrero de Pemex a la distancia al llegar me llevo una sorpresa:
-No hay gasolina Jefe
-Como que no hay? D_D!
-Hay desabasto y no ha llegado
-Pues que caray, gracias
Continuo otro tramo de carretera, y veo una gasolinera del otro lado del camino, avanzo un poco y hay un retorno, al llegar a la gasolinera, misma historia. Desabasto. Esto me extraña mucho, ahora en Enero del 2017 con todos los problemas actuales en este tema, comprendo que ese era probablemente el inicio de la problemática.
Esta situación ya me preocupa un poco mas, en la ultima gasolinera no me dieron buenas referencias de donde encontrar la próxima, si no hasta una bastante lejana, y mi nivel de combustible no me va a dar para llegar. Mientras avanzo sobre la carretera 49, vengo preocupado, y decido preguntar donde conseguir a la primera persona que vea. Resulto que dicha persona fueron 4 muchachas en un parador de autobús cubriéndose del sol por una sombrilla, me dijeron que en la ranchería que estaba cruzando la carretera había un señor que vendía gasolina.
Ni tardo ni perezoso me meto al camino que me indicaron llegando a una ranchería donde pregunto a un señor que estaba arriendo cabras, el me dice que llegando a la iglesia, a la izquierda con el señor que vende forraje. Efectivamente asi fue. 5 litros de gasolina $80 pesos.
- Forrajes Zayra
- Dandole de beber al corcel diría Omar
Puedo respirar tranquilamente, con esos 5 litros de gasolina puedo llegar hasta más allá de Zacatecas. El señor que me vendió la gasolina un poco intrigado por mí, inicia una amable platica, nueva ronda de preguntas ¿De dónde viene oiga? ¡¿desde tan lejos?! ¿y a dónde va?… menesteres de la ruta.
Una vez terminada la plática con un “que le vaya bonito joven que lo acompañe dios” me incorporo a la carretera 49 completamente decidido a comer algo… ya van a ser las 4 p.m. y la tripa aprieta. Veo el GPS y un entronque mas adelante, es el libramiento de Zacatecas, me detengo antes del libramiento para decidir si entro a Zacatecas a comer y posiblemente a ver casualmente a mis padres en aquellos rumbos lo cual implica más gasto de tiempo, o seguirme por el libramiento rumbo Fresnillo-Sombrerete y comer algo rápidamente en un oxxo. Justo cuando me detengo y estoy por mandar un mensaje al grupo de Motoruta en whatsapp me llega uno, que dice, “Zacatecas”, era Omar quien se estaba reportando, él había salido de Puebla a las 5 a.m. Yo levanto la mirada y observo una motocicleta justo adelante de donde estoy yo, también parada en el desvió, le pregunto por mensaje que donde está el, si está en el libramiento, lo cual responde que sí, le contesto, ¿traes un chaleco naranja?, nuevamente afirmativo, le mando una foto, ¿eres tú?, yo estoy atrás de ti, voltea!
- Estoy atrás!
Reunión en el entronque es lo que sucedió, nos saludamos, el abrazo, intercambiamos opiniones e impresiones rápidamente. Omar trae una Yamaha RXZ 135cc de 2 tiempos, asi que podemos ir a una velocidad bastante similar. Decidimos ir por el libramiento y comer más adelante.
- Se cumple la Máxima del Sitio de Motoruta
- Nos vemos en el camino
Omar viene sufriendo la misma situación que yo, no había encontrado combustible, y al parecer paso a las mismas gasolineras que yo, así que en cuanto veamos una, a cargar.
Pasamos el libramiento y su caseta sin problema, en general vamos a un ritmo muy parejo, pero en subida, yo me adelanto y lo espero en la caseta. El me pasa y lo alcanzo poco mas adelante y nos vamos parejos.
- Omar en su Yamaha Rxz 135 2 Tiempos
Este tramo, pasa muy apaciblemente, vamos a buen ritmo, con una tarde que nos esta ayudando en todo, ligero viento, un sol calentando bien, la carretera semi despejada, todo lo que un motociclista puede pedir.
Mas adelante pasamos otra caseta, me doy cuenta que mi celular esta sonando, desde antes de cruzarla, me extraña un poco asi que decido contestar, no quiero que sea algo urgente y que se me pase. Le digo a Omar que continué, que ahorita no tardo en alcanzarlo, el me comenta que se va lento para esperarme. Hago un par de llamadas, y a darle, al parecer no fue tanto tiempo, pero por mas que acelere ya no alcance a ver a Omar, asi que supuse que el siguió su camino, esta bien, se que probablemente mas adelante nos encontremos.
Pasando fresnillo nuevamente la tripa aprieta, y decido comer algo rápidamente en el primer lugar que vea disponible. Entrando a un lugar que se llama Río Florido, veo un Oxxo y me detengo, esta escala no me llevara mucho tiempo, tengo prisa y el sol ya se está ocultando. Paso y compro unos burritos alguna bebida hidratante, botana ligera y a comer al lado de la moto estacionada se ha dicho. En esos asuntos me encontraba yo degustando un burrito en extremo caliente, cuando veo como llega al estacionamiento un joven en caballo, desde lejos observe que se me quedaba viendo, no le preste importancia, finalmente es algo relativamente común llamar la atención cuando traes todo el equipo de la moto encima. Al llegar al oxxo, se baja el muchacho y al no ver donde amarrar al caballo, me habla amablemente:
- Oiga amigo, podría cuidarme al caballo en lo que voy al Otzo?
- No veo porque no, a ver, pásamelo
Entonces imaginen la escena, estoy al lado de la moto, con una mano comiendo un burrito y con la otra sosteniendo un caballo.
Al salir el muchacho, le doy las riendas y me agradece, pero su mirada tenía una sonrisa que no se quitaba, y no dejaba de verme ni a mí ni a la moto, hasta que finalmente me dijo:
-Oiga, ¿de donde viene?, – De México, -Osuuu! ¿y a dónde va?, -A Durango, -Va lejos!, Es que yo tengo una moto igual a la suya!
Pienso internamente, ¡Aaah! eso explica por que no me quitaba la mirada, el muchacho continua charlando conmigo: -si es igualita, la misma, Suzuki, pero en blanco, y fíjese, usted de tan lejos, y yo no me animo a ir a Sombrerete porque pensé que no aguantaba. -Si, si aguantan, pues ve donde ando, y todavía me falta un tramo.
La conversación se extiende unos minutos, él quiere platicar más acerca del viaje que estoy haciendo y de la moto, amablemente me invita a su casa, -Es la hora de la comida, hicimos “Discada“, por eso vine a las tortillas-. Por muy tentadora que sea la oferta tengo que pasar, mi destino espera y sigo con pequeños atrasos que dicho sea de paso, son bienvenidos, todos y cada uno me esta dejando algo. Me despido de mi nuevo amigo no sin que antes me dijera que si paso por ahí de nuevo, lo busque y en sus palabras, “armamos algo, una comida, unas cervezas o algo”, me da indicaciones de donde está su casa, a lo que yo le ofrezco toda mi gratitud y nos despedimos.
- Con mi nuevo amigo de Zacatecas
El sol cada vez está bajando más y más, yo sigo con la intención de recorrer kilómetros sin parar, tengo que llegar a Sombrerete antes de que anochezca pienso en mis adentros. La carretera se encuentra en excelente estado, y sola, completamente sola, ni un alma, ni en mi sentido, ni en sentido contrario, muy esporádicos autos pasan, a todos los dejo pasar orillándome, porque voy un poco de subida y mi velocidad es de 95 – 100 km/h promedio, no soy rival para las camionetas de 6 y 8 cilindros que pasan a mi lado. Las montañas en el horizonte y las planicies desérticas a mi derecha me evocan una vida que nunca tuve, pero que vivo a través de las historias de familiares que puedo alcanzar a recordar.
Zacatecas se me está haciendo eterno, ya tengo varias horas en el estado y sigo viendo letreros que dicen Sombrerete, y no veo la hora de pasarlo, los cactus y los mezquites al lado de la carretera ofrecen un panorama que ya conocía, pero que me es muy raro verlo, mas acostumbrado a paisajes de montaña, el estar en esos parajes, me regocija mucho. Sigo avanzando pero el sol es más rápido que yo y se comienza a ocultar en las montañas de mi lado izquierdo, tonos crepusculares empiezan a aparecer en todo mí al rededor para deleitarme con delicados tonos lilas, rosas, naranjas, azules profundos, todo un espectáculo visual, una vez más, me arrepiento de no poder capturar toda la magnificencia de la luz, aun así me detengo un momento para capturar el momento tanto en cámara, como mentalmente.
- Colores Crepusculares
- ¿Sol a sol?
- El Desértico camino de Zacatecas
- Vamos bien fiel compañera
- Cruzando el eterno Estado Zacatecano
- Gixxer en el Crepúsculo
Mientras nuevamente monto en la moto, me preparo mentalmente para afrontar el desierto zacatecano de noche, afortunadamente sé que son puras líneas rectas, mi faro de 3000 lm me provee de una iluminación muy buena, traigo todos mi Hi-Viz y reflejantes puestos, y todas las precauciones que puedo tomar, enciendo intermitentes y a darle de nuevo.
No pasa mucho para que me detenga de nuevo, y es que, ¿como no capturar esto?.
- Paisajes Motoruteros
Y es que Zacatecas con su desierto me está despidiendo de la mejor forma, aunque todavía no haya llegado ni a Sombrerete, no obstante, yo lo siento de esa forma.
Continuo prácticamente sin novedad inmerso en mis cavilaciones, atento al camino, haciendo cálculos mentales de tiempo, una nueva preocupación aparece en mi mente, la gasolina de nuevo, pienso que cerca de Sombrerete debe haber alguna gasolinera en la carretera. Recuerdo que Almighty habla sobre la tierra antes de llegar al pueblo mágico, se vuelve rojiza dice, y le recuerda al planeta Marte, ahorita debo estar pasando justo esos campos, hace años ya había pasado por esta carretera en autobús, y tengo algunos recuerdos de ella, lástima, ahora es de noche y poco puedo ver.
Kilómetros y Kilómetros más, recta interminable, secuencia de lineas hipnotizantes en el camino, el cansancio aqueja, y la mente se esfuerza por mantenerse enfocada, la realidad es sencilla, me está dando sueño, y estoy a nada de quedarme dormido, ya llevo más de 750 km a mis espaldas, y el camino no ayuda mucho, realmente es una batalla la que estoy librando y recuerdo que días antes en una conversación en el grupo de Motoruta, Almighty le advirtió a Pitalúa acerca de eso mismo, que se iba a encontrar con una sección donde su mayor problema era no quedarse dormido… creo que estoy en esa sección del camino, tengo que mantenerme despierto y alerta, me muevo una y otra vez, abro el casco, hago todo lo que me imagino me pueda ayudar. Mi mente comienza a divagar un poco pensando, “mendigo Pitalúa ayer en su GS a las 3 de la tarde ya estaba en Durango capital, y yo son las 6:45 y todavía no llego ni a la entrada de Durango!”, la diferencia de viajar en baja cilindrada.
Finalmente veo las desviaciones a Sombrerete, las paso de largo esperanzado a una gasolinera, craso error, sigo avanzando y no aparece nada en el camino, me detengo adelante en un puesto de inspección fitosanitaria para preguntar por alguna gasolinera, a lo que un encargado del puesto me dice que en el primer pueblo entrando a Durango, a no más de 20 minutos, o que puedo regresarme a Sombrerete, pero “al mero pueblo”, porque sobre la carretera no hay estaciones. Definitivamente no quiero regresarme, por pérdida de tiempo y ya no quiero ver letreros que digan “Sombrerete”. Agradezco, hago cálculos y me convenzo a mí mismo, si llegamos a Durango.
Avanzo un poco y ahora me encuentro con un retén militar, generalmente en esos retenes me dicen que me siga sin hacerme parar, pero esta ocasión desde la distancia vi que algo les llamo la atención, y me hicieron detenerme, y pasar al lado derecho para una “inspección”. Preguntas escuetas acerca de que hacia ahí, solo me preguntaron si traía mis papeles, obviamente si, todo bien, pero casualmente, si muchas preguntas enfocadas a la moto, ¿que cilindraje es?, ¿que kilometraje me da?, ¿si aguanta recorrer mucho tiempo seguido?, ¿que fallas me ha presentado?, todas las preguntas hechas por un mismo Soldado, pronto caigo en cuenta que me pararon porque el militar quería comprarse una moto, y estaba en duda entre el modelo de mi Gixxer y una Honda Invicta (obviamente es superior la Gixxer jaja), cuando hube despejado todas sus dudas, me dieron las gracias y me dejaron ir, pérdida de tiempo (o no), aproximadamente 20 minutos.
Finalmente veo el letrero tan largamente esperado. “Bienvenidos a Durango” entro al estado, pasando las 7:30 p.m.
- Bienvenidos a Durango
- Finalmente en el estado destino
Después de tomar estas fotos, reviso los mensajes, y veo que en el chat de motoruta, hay varios mensajes atrasados, los compañeros desde Durango ya bien instalados preguntan por nosotros, Omar responde que está en un pueblo en Durango adelante de la entrada del estado, paso a cargar gasolina. Yo respondo que voy justo entrando al estado, finalmente Omar me esperara en la susodicha Gasolinera.
No pasan mas de 15 minutos cuando veo el pueblo, efectivamente la Gasolinera estaba donde el señor de la estación fitosanitaria me dijo que estaría, paso a cargar la moto de nuevo, que ya otra vez estaba entrando en reserva, y listo, con eso llego a la capital sin problemas. Desde que llegue vi la moto de Omar estacionada afuera de una tienda, así que me estaciono al lado de él y entro, Omar como siempre sumamente amable, una persona de gran calidad humana y de valor sin duda alguna. Me invita un café para el frio, que ya tiene un rato haciendo estragos, poco a poco siento como la bebida me regresa el calor al cuerpo, pero no será por mucho, ya que tomamos carretera después de un breve descanso, aprovecho para volver a ponerme la ropa que me había quitado, y a darle sin parar hasta Durango.
- Omar esperándome
- Incansable Yamaha Rxz 135 2 Tiempos
Cuando iniciamos la marcha observo que la luz de la Yamaha de Omar, a pesar de que le modifico el faro no ilumina como nos gustaría. Posteriormente Omar explicaría entre conversaciones por qué la falta de potencia en el faro, y es que de verdad Omar sabe de motocicletas. Ante esta situación, decido ir cerca detrás de él a un lado, para que mi faro alcance a iluminar también su carril, al parecer esto nos funcionó muy bien en lo que restaba del trayecto, nos fuimos lo más rápido que podíamos, hacíamos los rebases coordinados y dejábamos pasar sin problema. En verdad da gusto encontrarse con ruteros que se adaptan y se acoplan a tu estilo de manejo, una verdadera delicia.
Kilómetros más y finalmente llegamos a Durango, contactamos al grupo, ellos están cenando tacos, nos pasan la dirección, pongo el GPS y después de unos problemas de envió con direcciones equivocadas, llegamos al lugar. Yo tengo un frio que no puedo quitarme, no dejo de temblar por un buen rato, al entrar al restaurante inmediatamente veo donde están todos. Es sumamente agradable ver a tus amigos y conocidos y a los que no conoces reunidos por un mismo asunto, rodar. La esencia Motorutera en pleno.
Saludo con mucho gusto a todos los presentes, Almighty de Toluca, Zolin Culichi Poblano, Jorge que vive ahí en Durango, a Pitalúa que solo lo conocía por su relatos de la CDMX (o es el Edo de Mexico? mmm), al igual que a Erick de Hidalgo, y bueno nosotros que acabamos de llegar Omar de Puebla y yo mero, una buena representación rutera del centro del país. En lo que ordenamos y cenamos, nos vamos poniendo al corriente de todo lo ocurrido, Al parecer a Zolin le estallo la llanta, y Almighty mato su motocicleta con tanto artilugio que trae, Erick trae una fuga de los retenes, y Pitalúa se regresa a la CDMX mañana mismo. Ajetreado día definitivamente.
Terminamos de cenar y tomamos la obligada foto de la reunión con todos los miembros que asistimos.
- Reencuentros y encuentros
- Motoruta México 2016 #Durango16 (Foto cortesía Almighty)
El día está terminando no sin una pequeña perdida en el trayecto por parte de Omar de regreso al hotel, una revisión rápida a las motos determina que todo el movimiento que se tenga que hacer, será el día de mañana temprano. Unas cervezas, platica amena, reparto de souvenirs y es hora de cerrar el día.
Esta ha sido la ruta más larga que he hecho hasta el momento, algunos me dicen loco, y tal vez tengan razón, pero hasta que no se pongan a rodar no podrán saberlo.
Todo esto que he escrito es solo una pequeña muestra ante la magnitud y magnificencia de nuestro país, tiene mucho que ofrecer y caminos por recorrer, muchos de ellos sin que nos demos cuenta siquiera que existen, pero como dicen un buen amigo, “es solo cuestión de ponerse a rodar y ya”, les dejo este cortísimo video tratando de ilustrar mejor mis palabras, espero lo disfruten tanto como yo lo disfrute rondado y editando.
Gracias por acompañarme hasta este punto, se que el relato fue un poco largo, pero, mas larga fue la ruta
Cheers!!
Los espero en la segunda entrega.
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